La Leyenda de Sant Jordi
Hoy, en el Blog de Garciflors, floristería en Sabadell, queremos hacer una pequeña explicación sobre la leyenda de Sant Jordi, debido a las fechas en las que nos encontramos.
Sant Jordi es el patrón de Cataluña y su celebración da lugar a unas de las festividades más conocidas del país. Además también es el santo patrón de muchos países e ciudades como Inglaterra, Georgia o Tumbuctú. A continuación les explicaremos la versión catalana más contada del cuento.
Según cuenta la leyenda popular, un dragón atacaba el pueblo de Montblanc. Los habitantes atemorizados decidieron entregarle dos corderos cada día para aplacar su furia. La estrategia funcionó ya que el dragón dejó de atacar y se asentó en una cueva. Cuando los animales empezaron a escasear el rey decidió enviar a una persona, escogida por sorteo de entre todos los habitantes del reino, y un solo cordero. La familia que sufría una pérdida de uno de los miembros era compensada económicamente. Un día, el sorteo determinó que era el turno de la hija del rey, la princesa. Esta era muy popular entre el pueblo y muchos ciudadanos se ofrecieron para ser devorados por el dragón en su lugar. Pero el rey, con mucho dolor, decidió tratar a su hija como a la de cualquier otro y mandó a su hija a ir a la cueva del dragón.
La princesa abandonó el castillo para encontrarse con la bestia mientras todo el pueblo la observaba partir. Mientras la chica estaba llegando a la cueva, se encontró con un caballero de brillante armadura a lomos de un caballo blanco. Entonces ella le advirtió que un dragón vivía cerca de allí y le dijo que huyera. Él contestó que no se preocupara, que había viajado dese muy lejos para protegerla a ella y a su pueblo. Entonces de repente, la bestia apareció y empezó una intensa lucha entre el dragón y Sant Jordi. Al fin el caballero consiguió matar al dragón clavándole una lanza en el corazón. De la sangre que caía al suelo, brotó rápidamente un rosal con las rosas más rojas que se habían visto nunca. Sant Jordi cortó una rosa y se la ofreció a la princesa. El rey le ofreció todo tipo de riquezas al caballero por haber salvado a su hija, pero Sant Jordi prefirió tomar la mano de su hija.
De allí que para los catalanes también sea el día de los enamorados. En Cataluña la tradición es que los hombres regalen una rosa a las mujeres y estas un libro a cambio. Por lo tanto el 23 de abril de cada año las calles están a abarrotar de puestos ambulantes de vendedores de rosas y libros que llenan las calles de colores y cultura.
Aquí tenemos pues, el origen de la tan popular leyenda de Sant Jordi, la cual hace que cada 23 de abril tengamos las calles llenas de libros y rosas.
En los próximos post de Garciflors, floristería en Sabadell, seguiremos tratando temas relacionados con el mundo de la floristería.